Una mujer en la India había comenzado a tener dolores recurrentes en uno
de sus ojos, por lo que tras no soportarlos más decidió acudir al
médico local, quien después de realizarle varias pruebas descubrió algo
que lo dejó sumamente impresionado, puesto que ella tenía algo dentro, y estaba vivo.
Resultó que debajo del párpado la mujer tenía una enorme lombriz,
que aunque representaba un peligro muy grande podía ser extraída. El
médico aseguró a su paciente que conservaría la vista, pero siempre y
cuando le fuera sacada dicha lombriz.
El proceso fue algo tardado y complicado
pero pudo sacársele dicha lombriz, la cual midió 12 centímetros de
largo, y tras su análisis resultó ser una ‘lombriz dirofilaria’, un parásito que es transmitido por un mosquito, que por lo regular ataca a los animales, llegando a moverse hasta el cerebro o al corazón y causándoles la muerte.
Solo se han registrado 800 casos como este en el mundo,
y el anterior fue el de un chico de 17 años en Perú, a quien le fue
extirpado un gusano del mismo tipo del ojo. Este le sacado por personal
médico con ayuda de pinzas y albahaca, con la cual atraían al gusano
para poder atraparlo sacarlo. Este gusano medía 3 centímetros, y era del
mismo tipo que el de la mujer india, transmitido por un mosquito.
Sin dudas son cosas terribles de ver, y mucho peores de vivir,
pero en realidad no son muy viables para evitar, ya que la única manera
de hacerlo es tratando de no frecuentar zonas en donde habiten muchos
animales, o lugares muy rurales. De cualquier forma hay que estar muy
atentos a los síntomas que se tienen, y ante cualquier dolor extraño
acudir al médico si o si.
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