El trasplante de conos representa una solución terapéutica para patologías de la retina causadas por la degeneración de las células fotorreceptoras
Por fin parece que algunas personas con degeneración macular asociada a la edad
(DMAE) podrían ser tratadas mediante el trasplante de fotorreceptores
producidos gracias a células madre embrionarias diferenciadas. La buena
noticia la acaba de presentar el equipo del profesor de la Universidad de Montreal (Canadá), Gilbert Bernier, y podría ser la solución a una de las mayores causa de ceguera en el mundo.
En concreto Bernier y su grupo del Hospital Maisonneuve-Rosemont
han desarrollado una eficaz técnica 'in vitro' para producir células de
la retina sensibles a la luz a partir de células madre embrionarias
humanas. «Nuestro método tiene la capacidad de diferenciar el 80% de las células madre en conos puros [células
necesarias para poder ver]», explica Gilbert. En su trabajo, los
investigadores vieron a los 45 días que los conos desarrollados
fabricaron de forma espontánea tejido retiniano de 150 micras de espesor
hicieron. «Nunca se había logrado hasta ahora».
El equipo de Bernier ha trabajado en ratones sanos a los
que se inyectó inyecta racimos de células retinianas en sus ojos. De
esta forma vieron que los fotorreceptores trasplantados migraron de
forma natural ade la retina del animal. Según Bernier, el «trasplante de
conos representa una solución terapéutica para patologías de la retina
causadas por la degeneración de las células fotorreceptoras».
Grandes cantidades
Pero el principipal problema hasta la fecha ha sido obtener
grandes cantidades de conos humanos. La solución a esta problema la
publica en la revista «Development»
y supone una esperanza para que los tratamientos para enfermedades
degenerativas que actualmente no son curables puedan ser tratadas con
eficacia, como la enfermedad de Stargardt y la DMAE.
Durante años hemos estando tratando de resolver este problema. Y ahora, comenta, «gracias
a nuestra propuesta simple y efectiva, cualquier laboratorio del mundo
podrá crear grandades cantidades de fotoreceptores. Y aunque
todavía hay un largo camino por recorrer antes de iniciar los ensayos
clínicos, en teoría, en el futuro podríamos tratar un sinnúmero de
pacientes».
La DMAE es la mayor causa de ceguera entre las personas mayores de 50 y afecta a millones de personas en todo el mundo
Los hallazgos resultan especialmente importantes para
mejorar la esperanza de vida de los pacientes con DMAE, la mayor causa
de ceguera entre las personas mayores de 50 y afecta a millones de
personas en todo el mundo. Y a medida que envejecemos, es más y más
difícil de evitar. Las personas con DMAE van perdiento poco a poco la
percepción de los colores y de los detalles hasta tal punto que ya no
pueden leer, escribir, ver la televisión o incluso reconocer una cara.
La DMAE se produce por la degeneración de la mácula, que es
la parte central de la retina que permite a la mayoría de la visión.
Dicha degeneración está causada por la destrucción de los conos y las
células del epitelio pigmentario de la retina (RPE), un tejido
responsable de la reparación de las células visuales en la retina y la
eliminación de las células ya desgastadas. Sin embargo, este
proceso de reparación se hace menos eficiente a medida que envejecemos,
y el mantenimiento del epitelio pigmentario de la retina es cada vez
menos eficaz y se van acumulando residuos formando depósitos. Se
sabe, explica el investigador, que es bastante sencillo diferenciar las
células del EPR es bastante fácil. Pero el problema, añade, «radica en
que para llevar a cabo una terapia completa necesitamos tejido neuronal
que asocia todas las células del EPR a los conos. Esto es mucho más
complejo».
Molécula COCO
Gracias a sus investigaciones en los genes que codifican y
permiten la inducción de la retina durante el desarrollo embrionario,
Bernier llegó a la conclusión de que existen una molécula natural cuya
función es forzar a las células madre embrionarias a convertirse en los
conos de convertirse. Y la proteína misteriosa es COCO, una molécula
humana de 'recombinación' quenormalmente se expresa dentro de los
fotorreceptores durante su desarrollo.
Su trabajo en el Hospital Maisonneuve-Rosemont ha permitido
aislar la molécula y determinar que, para crear conos, COCO puede
bloquear sistemáticamente todas las vías de señalización que conducen a
la diferenciación de las otras células de la retina en el ojo. De esta
forma, añade Bernier, se han podido producir fotorreceptores de fotos y, más específicamente, los investigadores han fabricado S-conos, que son prototipos de fotorreceptores que se encuentran de hecho en los organismos más primitivos.
Los hallazgos de Bernier podrían permitir el tratamiento de
las enfermedades degenerativas de la retina humanas mediante el uso de
células madre pluripotentes inducidas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario